Dicen que cuanto más pobre es un pueblo más creyentes habitan en él. Supongo que es fruto de la necesidad humana de creer en algo. El mundo moderno y su capitalismo ha sustituido la necesidad de creer por la necesidad de poseer, de tener, de querer tener más. Un materialismo que apacigua cada vez menos. Las sectas resurgen de nuevo, personajes famosos que lo tienen absolutamente todo recurren a religiones en busca de ese algo, religiones hechas a su imagen y semejanza como la Cienciología de Tom Cruise o el especial Budismo de Madonna o Brad Pitt. Religiones que les permiten conjugar su mundo de comodidades con la contemplación y la devoción, sin el miedo al pecado o al castigo del cristianismo.
Particularmente esta moda o tendencia me preocupa. La sociedad está evolucionando a pasos agigantados en nuevas tecnologías, avances médicos, investigación... pero involucionando en relaciones humanas.
Hoy, después de esta reflexión o ida de olla de una servidora, os dejo con un botón como muestra. Un niño predicador que causa furor en Sudamérica. Juzgad vosotros mismos. Lejos de parecerme cómico, me da miedo ver tan lleno ese pabellón. Tanta gente escuchando las barbaridades que ese niño dice. En fin la involución está cada vez más cerca. Disfrutad de este martes.
Particularmente esta moda o tendencia me preocupa. La sociedad está evolucionando a pasos agigantados en nuevas tecnologías, avances médicos, investigación... pero involucionando en relaciones humanas.
Hoy, después de esta reflexión o ida de olla de una servidora, os dejo con un botón como muestra. Un niño predicador que causa furor en Sudamérica. Juzgad vosotros mismos. Lejos de parecerme cómico, me da miedo ver tan lleno ese pabellón. Tanta gente escuchando las barbaridades que ese niño dice. En fin la involución está cada vez más cerca. Disfrutad de este martes.
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